La conducción Lammens - Tinelii puso a San Lorenzo de pie, pero se mostró errática en el último mercado de pases
Que Matías Lammens y Marcelo Tinelli son los grandes responsables de que San Lorenzo haya resurgido de las cenizas, no hay ninguna duda.
Que bajo su conducción el club volvió a los primeros planos del fútbol local (Campeón Torneo Inicial y Subcampeón Copa Argentina) y del plano internacional (Campeón Copa Libertadores y Subcampeón del Mundial de Clubes) también es cierto.
Pero hay que reconocer también que probablemente en el semestre más importante de la historia de San Lorenzo se mostraron erráticos en el mercado de pases.
Y en esto incluyo fundamentalmente al manager Bernardo Romeo, quien no previó algunas cuestiones vinculadas a salidas y llegadas de jugadores.
La venta de Ángel Correa sin haber previsto su reemplazante y la no renovación del jugador más desequilibrante del plantel, Ignacio Piatti, para ser reemplazado por un "Pitu" Barrientos que mostró un estado físico lamentable, a tal punto que el "Patón" Bauza llegó a decir que "así no se puede jugar en el fútbol argentino con el freno de mano puesto", son muestras de cierto grado de improvisación. Igual el Pitu está mejorando y con una buena pretemporada arrancará mejor el 2015.
La salida del colombiano Valdes fue insólita. Mientras en Buenos Aires nadie sabía nada, este periodista pasó al aire en Ciclón de Boedo Radio una nota en Colombia del propio jugador diciendo "no estoy seguro de volver para jugar las semifinales de la Libertadores", UN MES ANTES que en San Lorenzo se enteren de esta noticia.
Y para colmo de males, en el inicio del torneo de transición, el mejor defensor del equipo, Santiago Gentiletti, hace valer la cláusula de rescisión y se va a jugar a Italia a cambio de 2,5 millones de dólares (la mitad tenía San Lorenzo de su pase).
Para tapar el hueco dejado por Gentiletti, se trae a Mario Yepes, un jugador de 38 años, muy desgastado, que venía de un buen mundial en Brasil con Colombia, pero que le había dicho que no a Independiente unas semanas antes porque no tenía "ganas de trasladarse a Argentina".
Y el colombiano, como se lo vio en el torneo local, jugó de compromiso, sin ganas, su cara lo demostraba, su forma de actuar en la cancha era una muestra clara de su poco apego a estar metido en los partidos y así se lo conté a ESPN en una entrevista a 48 horas de la gran final contra el Real Madrid, cuando preparaban una nota sobre la gran trayectoria de Mario Yepes.
La llegada de Leo Franco, un arquero de vuelta, también con 38 años, con problemas judiciales deportivos en España según cuenta el diario MARCA, fue otro grave error del manager, cuando por poner un ejemplo el arquero Campestrini estaba con el pase en su poder, libre de Arsenal, o la figura del ascenso de Temperley, el arquero Crivelli, gritaba a los 4 vientos su amor por San Lorenzo.
Bauza lo sabe y en cada conferencia de prensa pidió por 4 refuerzos de jerarquía para el 2015. Y a eso habría que sumarle un par más en caso de concretarse las ventas de Kannemann, Villalba y Mas al fútbol extranjero.
Se viene un año difícil cargado de torneos: Torneo largo de 30 equipos, Copa Libertadores, Copa Argentina, Recopa, etc, etc, etc y se necesitará potenciar a un plantel que quedó con menos luces a partir de junio de este año.
La pelota la tienen los dirigentes, el mercado de pases es libre y a mitad de año los europeos pueden venir por más jugadores mientras en Argentina se siga disputando el torneo.
A no fallar.
ALDO GAIBUZ
CICLÓN DE BOEDO
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