"El día de mañana, nuestro trabajo, va a dejar sus frutos"

MANO A MANO CON OMAR ASAD, DT DE SAN LORENZO, A HORAS DE UN JUEGO CLAVE ANTE ALL BOYS

¿Te pasa lo mismo que al Gallego Méndez, que los hinchas de Vélez no le perdonan haber venido a San Lorenzo?
No, a mí no. Y eso que he ido a ver a mi hijo, que juega en las inferiores. Llevo a mi hija a tenis. Vivo a 14 cuadras de Vélez y muchos hinchas me dan el apoyo, quieren que vuelva, que dirija la Primera el día de mañana en cualquier momento... Al menos ninguno me lo demostró. Puede ver a alguno que le haya caído mal... Pero por ahora no lo noté.

¿Al no estar peleando el campeonato, te sentís en deuda con la gente de San Lorenzo y con vos mismo?
De arranque sí. Porque tenía esa idea. De buscar pelear, ser protagonista. Suena a excusa y no me gusta repetirlo, pero es la realidad: tuvimos muchos inconvenientes para armar los equipos fecha a fecha. Tuvimos problemas también de inhibiciones, que contábamos con algún jugador y con otro no. Después contábamos con todos al día del partido, lesiones el día del partido, traumatismos, y el mal arranque de local nos perjudicó bastante. Pero me fui acomodando a lo que tenía. No había más que los nombres que teníamos en carpeta. Yo me había hecho ilusiones de pelearlo... Bueno, no se dio.

En tu carrera futbolística fuiste dirigido por Bianchi. ¿Eso te dejó alguna enseñanza que hoy en día podés transmitirle al plantel?
La más firme de todas es la que me manejé en inferiores y que como técnico del Tomba y de Emelec, que fue ser sincero siempre con el jugador. Decirle siempre la verdad. Recibí consejos de Carlos (Bianchi) de esa manera. Lo viví. Hablo muy seguido con él, cada 15 días. Me aconseja. Eso me quedó: no mentirle nunca al jugador, porque es el que pone la cara por vos en la cancha. Así que tenés que ser honesto y sincero con él en todo, si está bien, si está mal, darle la explicación, el porqué, y tomar la decisión en el momento justo. Un poco me quedó grabado eso siendo jugador también.

¿Por qué elegiste al Pacha Cardozo como ayudante?
¡Porque no había otro! Mentira (risas)... Yo ya lo tenía en mente. Mi forma de encarar los partidos es muy ofensiva, de ir al ataque, buscar variantes... Pero a veces me descuido y no miro tanto atrás. Y oh casualidad, que los tres que podían ser mis ayudantes, que eran el Coyo Almandoz, el Pacha Cardozo y Víctor Sotomayor, fueron los tres defensores. Coyo estaba trabajando, Víctor no quería venir de Córdoba y el Pacha se presentó disponible para hacerlo. Pero yo ya le había hablado dos años antes que agarré Godoy Cruz, aceptó y yo tampoco tenía tanto conocimiento de él como ayudante. Lo fui conociendo, fui sincero con él, le dije que iba a estar a prueba conmigo, que lo iba a ver, que lo iba a conocer y en la medida que me sintiera cómodo con él, iba a seguir y lo tomó bien y estamos ahí cerrando el segundo año.

¿Y a Migliore como capitán?
Lo de la cinta de capitán me demoré hasta la última semana previa a la competencia, no me apuré para nada. Evalué muy bien muchas situaciones, futbolísticas, de convivencia, de compañerismo, institucionales, contractuales, económicas... Consensué con el cuerpo técnico... Hemos mirado todo lo que se hacía bien y lo que se hacía mal y nos decidimos por él. Había muchas condiciones para que uno tomara una decisión y el que mejor reunía esas condiciones para tener un poco más de respaldo entre todos era Pablo. Pero uno sabe que eligiendo al capitán molesta a alguno, pero la decisión fue mía, que sea un abanderado de grupo, que responda con lod dirigentes, ante la prensa, en representación del grupo...

Por último, Turco, ¿qué marca te gustaría dejar acá en San Lorenzo?
Por lo pronto el laburo que se está haciendo. El día de mañana, nuestro trabajo, va a dejar sus frutos, porque estamos laburando mucho. Esa sería una huella, que va a quedar. No sé si se va a ver o van a hacer hincapié en eso. Y la segunda huella puede llegar a ser una muy buena campaña. No sé si salir campeón. Sería ideal salir campeón, pero sí tener una muy buena campaña. Y tercero, bancar el proyecto de San Lorenzo, en el cual yo vine acá, que era potenciar chicos, empezar a ver en cancha a juveniles con un futuro enorme. Y en eso estamos. Creo que esa sería la mejor huella. Después está en el jugador, está en los dirigentes, en el día a día, que hablen bien o mal de vos.

NICOLE MEDVUIDENUR
SOY SAN LORENZO