El que sigue sin aparecer es Juan Manuel Salgueiro, quien aún tiene un año de contrato en el club. El uruguayo no quiere continuar en Boedo, aunque su trueque por el Chino Luna está un poco frío.
El punta se quiere ir, cosa que ya deseaba en enero, cuando Madelón lo convenció de que no se fuera a Peñarol.
A Salgueiro se le adeudan las primas del último semestre y el premio del último partido, como al resto de los jugadores. De esta situación se agarra el charrúa para no presentarse a entrenar.
Si bien era uno de los preferidos de Caruso, su salida parece inminente.
En Ciudad Deportiva se llevó a cabo un nuevo entrenamiento de San Lorenzo, otra vez a puertas cerradas. Igualmente no hay mucho para ver, ya que no hay incorporaciones en el Ciclón.
Alvarado y Bottinelli tampoco se presentaron, ambos con contrato vencido. Apu firmaría un nuevo vínculo en las próximas horas. Por la misma vía van Romagnoli y Kanemann, quienes sí se están presentando a las prácticas.
Con este panorama, Caruso no quiere saber nada con ir de pretemporada a Pilar. Entiende que sin los jugadores que deban sumarse será en vano trasladarse de Ciudad Deportiva.
Además, surgió cierto fastidio por el paro de empleados. Es que se acoplaron utileros y trabajadores de lavandería, por lo que los mismos jugadores debieron encargarse de su ropa y de los elementos para el entrenamiento.
Por otro lado, se ausentó Rafael Cabrera. El Pinky no será tenido en cuenta por el DT y ya inició negociaciones para pasar a Defensa y Justicia.
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